JIUCIO DEL REVÉS
EL JUICIO DEL REVÉS
Graves errores de Justicia por parte de la Jueza
La jueza fija lo principal en:
“La cuestión controvertida en la presente litis quedó fijada en si el actor se sometió al cuestionario de saludo o hubo ocultación de datos a la entidad aseguradora, y en el caso se de haber ocultación, si en la misma medio dolo o culpa grave.”
Vamos por partes con esto para que se vea claro que se dictó injusticia. Y para ello dividimos la frase para analizarla.
La cuestión controvertida en la presente litis quedó fijada en: a) si el actor se sometió al cuestionario de salud, b) o hubo ocultación de datos a la entidad aseguradora, y c) en el caso se de haber ocultación, si en la misma medio dolo o culpa grave.
a) Si el actor se sometió al cuestionario de salud.
Pruebas a favor de Ocaso y la Jueza:
Mi firma en la solicitud del seguro donde está el cuestionario.
Testigos agentes de seguros que dicen haberme hecho ese cuestionario.
Para la jueza mi firma está en el cuestionario y eso es prueba de que se me presentó ese documento. Y para la Jueza la testifical de los agentes de seguros, le corrobora que ellos mismos me hicieron ese cuestionario pues son testigos al entender de la Jueza sin interés en Ocaso.
Pruebas a favor mía e ignoradas por la Jueza:
Mi firma no está en el cuestionario, mi firma está en la solicitud del seguro de vida, pero que mi firma aparece en la hoja de ese cuestionario porque este va dentro de la solicitud que los agentes me presentan para firmar, y esto quedó bien claro en juicio, que se firma una vez la solicitud y dentro va el cuestionario, una sola firma para todo, dicho por boca del agente jefe de seguros. Por ello mi firma aparece en esa solicitud, pero sin ser informado de este cuestionario. La jueza obvia este detalle dejado bien claro en juicio, que lo que se firma es la solicitud y que ello valida un cuestionario que va dentro de la misma, y del que los únicos que tienen el poder de desvelar su existencia al asegurado, son los mismos que se benefician de que este valla en blanco, o sea, de los mismos agentes de seguros. ¿ cómo pueden ser entonces testigos independientes, veraces, y desinteresados, si prácticamente son los culpables ?. ¡ Estos nunca van a declarar lo contrario que les perjudique !, y el decir que se llevaron el cuestionario en falso pero con mi firma..., les perjudica seriamente, luego no van como testigos, ¡¡¡ van como interesados !!!.
El cuestionario se presenta rellenado de puño y letra por el agente de seguros, contradiciendo las normas de este mismo cuestionario, que dice que tiene que ser rellenado de puño y letra por el asegurado. La jueza ignora u obvia una de las normas impresas en esa solicitud que beneficia al asegurado, para dar por válida otra que arbitrariamente beneficia a la aseguradora, cuando si hay unas normas de rellenado hay que hacer caso a todas, y no sólo a la que beneficie a una de las partes.
Los dos testigos mienten sobre la primera pregunta del cuestionario entrando en una contradicción grave, lo que quedó patente y demostrado en Juicio, y esto demuestra la falsedad de esa primera pregunta que nunca pudo ser contestada de esa forma con un NO por mi, pues sobre lo que versa esa pregunta, ya quedó claro en juicio que si estos agentes que me la hubieran hecho realmente en su momento, o sea, cuando dicen falsamente que me hicieron el cuestionario, pues esa respuesta llevaría un SÍ, si realmente hubiese sido respondida por mi, y esto deja patente que a parte de no estar respondida por mi esa primera pregunta, también deja claro la deriva que coge este cuestionario de ahí en adelante en estar todo contestado de igual forma y tan falsamente con un NO.
El cuestionario viene todas las preguntas respondidas con un NO, ¡ todo !, siendo esto muy extraño, y dudoso, pues así rellenado, sólo era beneficioso para la aseguradora, y colateralmente a los agentes de seguros, pues de esa forma en la que lo rellenaron la compañía les aceptarían el seguro y no les pondrían pegas. Así que..., rellenado con todo que NO, sólo perjudicaba al asegurado. Y esto ha sido reconocido por los Tribunales de Segunda Instancia.
A parte de la primera pregunta del cuestionario, que quedó demostrado que no me la pudieron hacer porque está contestada con algo que no hubiera contestado en ese mismo momento de la firma si me la hubieran hecho, tenemos otra pregunta, tan esclarecedora como la anterior, y era la de si conducía motos, y esta..., de igual forma está marcada con un NO, cuando de haber sabido yo de esa pregunta, estaría marcada con un SÍ, pues yo conducía motos, y no sería lógico que yo ocultara esto al estar haciéndome un seguro precisamente por la cobertura de accidentes de tráfico, es una pregunta que deja claro lo extrañísimo de que yo hubiera dicho que no, cuanto más yo tenía entonces la moto aparcada en mi patio, por donde tuvieron que pasar los agentes para entrar en mi casa. Esta pregunta deja muy claro que nunca pudieron hacerme las preguntas del cuestionario. Pero la jueza..., admitió que me hicieron el cuestionario, y yo mismo mentí en esa pregunta para perjudicarme a mi mismo.
La fecha puesta sobre mi firma, la misma que tiene que datar el momento en que se puso esa firma..., ¡ es de 8 días después !, y puesta de puño y letra del agente de seguros, lo que demuestra sin lugar a duda alguna, que ese cuestionario fue rellenado el día que pone en esa fecha, aprovechando que se obtuvo ocultamente mi firma en la solicitud y esta iba en la hoja del cuestionario, que se lo llevó en blanco y de ahí el estar rellenado así de extraño y falso a favor solo de Ocaso y los agentes. Hay que recordar que eso es falsedad documental, pues una fecha y su firma forman un todo en un mimo dato, que es el que las dos, firma y fecha, sirven para dar fe de algo, y que ninguno de los dos datos puede ser diferente en el espacio temporal, la firma corrobora que algo se hizo en esa fecha, y a la vez, la fecha corrobora que esa firma se hizo ese día, ambas se complementan formado un todo de veracidad, con lo cual, ¡ nunca !, ¡ nunca !, un documento puede ser válido y verás si la firma y su la fecha de la firma no pertenecen al mismo día, pues es un dato que muta la realidad y eso está tipificado como falsedad documental. La Jueza, ignoró esto de vital importancia.
En ese mismo cuestionario..., hay un apartado que dice..., “ observaciones”, y este viene rellenado también de puño y letra por el agente de seguros, copiando literalmente en este apartado lo que le puse en un correo electrónico que me dijo que le mandara describiéndole a lo que me dedicaba, y que le puse 8 días después de la firma en mi casa de la solicitud de seguros, y viene copiado tal y como lo puse en ese email, con falta de ortografía en la misma palabra, con mayúsculas en los mismos sitios, todo exactamente copiado igual, y puesto en primera persona, apropiando mi identidad al transcribirlo. Esto deja muy claro, y demuestra que esto puesto en el cuestionario sólo lo pudo poner 8 días después de la firma en mi casa, cuando recibió mi correo, lo que demuestra una vez más que rellenó el cuestionario sin estar yo delante y aprovechando que llevaba mi firma al ser yo engañado y creer firmar sólo una solicitud, ignorando que llevaba un cuestionario al no ser informado de ello por los agentes de seguros, con muy mala fe. A la jueza en juicio, esto de que se le dijo de que la fecha que pone en mi firma no es la que realmente estuvieron en mi casa, sencillamente ni le echó cuenta, y aquí tiene un poco de disculpa, pues mi abogado no presentó los correos que demuestran esto, simplemente hizo una leve alusión a estos sin entrar más a fondo creo que debido a lo obvio que se veía todo, pero que aun así, la jueza debió investigar esto un poco más.
b) y c) Estos dos apartados del párrafo de la reflexión de a jueza sobre lo importante del juicio, pues son dos apartados que dependen en sí del anterior, de si me sometieron o no al cuestionario de salud, pues es el único modo de poder apreciar estas dos cosas, ocultación o dolo.
Pruebas a favor de Ocaso y de la Jueza:
Testigo perito médico. El cual redacta un informe y lo defiende en juicio personalmente, reflejando este perito médico en sus informe que yo tuve un melanoma en 2010 y que por ello yo estuve padeciendo un cáncer desde esa fecha y hasta la firma del contrato, teniendo además que tratarme de ese cáncer pues ya había derivado en metástasis afectando a los ganglios, y por ello habiéndome estado tratando de cáncer desde 2010 y hasta 2012.
Los informes médicos míos. ( de los que sólo deducen y no hacen caso a lo que dicen ).
Y también los de antes, los agentes de seguros y mi firma en el contrato. ( estos ya quedaron explicados ).
Pruebas a favor mía e ignoradas por la Jueza:
Testigo perito médico. El que presenta un informe medico pericial y trata de defenderlo en juicio oral, y que resulta que, incumpliendo el art. 335 de la LEC, miente radicalmente, oculta datos, informes, y prescripciones cruciales de mi historial médico desde 2010, con tergiversaciones y con una contradicción final sobre sus conclusiones finales del informe pericial presentado, mostrando además con todo esto y con su actuación en juicio oral una total predisposición en defensa de una de las partes, la aseguradora que le paga. Pues por mucho que hiciera un informe favorable a Ocaso y fue a defenderlo en vivo, esto no hace más que perjudicarle, ya que a parte de querer machacar con que no se trataba de un lunar, sino de un melanoma, y que eso significa cáncer, y es por ello que yo tuve un cáncer, pues..., para poder contradecir este perito a los informes médicos, en los que se dice que, es verdad que ese lunar era un melanoma, pero que se me extirpó y luego se investigó para poder certificar que no había llegado a nada más, ni a los ganglios, ni a haber metástasis, luego nada de cáncer, nada, erradicado, pues..., con todo esto, defender este perito lo contrario, llevándole la contraria e ignorando lo que los informes de los profesionales sobre esa materia dijeron, para seguir ere que ere con que yo padecí un cáncer y por ello tuvo que mentir al decir que como yo tuve un cáncer en 2010, y posteriormente metástasis en ganglios, es por ello que me estuve pasando por tratamientos para ese cáncer desde esa fecha y hasta la firma del seguro. Aquí la jueza hizo igual, ignorar lo que los informes decían y suscribir las palabras del abogado de Ocaso y las de este perito de Ocaso, cuando es todo una falsedad y se puede comprobar, salvo que efectivamente me quité un melanoma, todo lo demás son artificios, engaños, y despistes. ¡ Todo comprobable !, este perito mintió y quiso confundir y por lo que se ve le dio sus frutos.
Los informes médicos míos. Estos certifican todo. Me quité el lunar en 2010 que resultó un melanoma, se procedió con su extirpación completa, su investigación y análisis, arrojando este un contundente... T2N0M0, posteriormente se prosiguió con otra prueba crucial, la prueba del ganglio centinela, arrojando esta el resultado de negativo en melanoma en ganglios linfáticos, o sea, nada de nada, ni metástasis, ni cáncer, ¡ nada !. Con estos resultados se me dictaminó vida normal, y sin tratamientos, aconsejando las revisiones que se les puede aconsejar a toda persona normal y sin enfermedad alguna para que tome las precauciones básicas, y por último, porque así sería la operativa aunque no hiciera falta se me prescribió una prueba de imagen, un Pec-Tac, pero que todas estas revisiones pude haber prescindido de ellas sin problemas, pues yo estaba sano, fuerte y libre de enfermedad alguna, pero que mi precaución me llevó a asistir a esas revisiones por precaución.
Luego si tenemos..., T2N0M0, que significa que el lunar quitado era un melanoma, un T2, tumor de 2 milímetros, y que para llegar a ser grave tiene que pasar de 4 mm, que no había llegado a extenderse a los ganglios, N significa nódulos o sea ganglio, y 0, es cero, o sea nada, que además M, que significa metástasis, y 0, cero, lo que se ha extendido, o sea nada, y..., además a todo esto, le añadimos que la prueba del ganglio centinela dio negativa en ganglios linfáticos, o sea, nada de nada, ¡ pero es que es más !, y aun le sumamos la prescripción de vida normal, y sin tratamiento alguno, ni para nada... ¡ Díganme ustedes !, ¿ cómo puede una persona sentirse enfermo de cáncer ?.
Los testigos agentes de seguros. Estos mismos pudieron comprobar ante ellos a una persona, yo, perfectamente sano a la firma del contrato, de otro modo lo hubieran advertido en juicio y eso no lo hicieron, pues una persona enferma, y además de cáncer, salta a la vista, y teniendo a demás la certeza de que yo me encontraba trabajando en una profesión que necesaria aportar mucha salud.
b) o hubo ocultación de datos a la entidad aseguradora,
c) en el caso se de haber ocultación, si en la misma medio dolo o culpa grave.
Estos dos apartados com van supeditados al primero al “a)” vamos a denominarlos como intrascendentes, pues explicado todo lo anterior, y quedando claro que nunca se me hizo tal cuestionario, es pues que yo no puedo ser culpable ni de dolo ni mala fe sobre algo que ni sabía su existencia, ni tampoco ocultar enfermedad grave alguna en un documento que ni se me presentó para rellenarlo. De quienes si se puede hablar de dolo o mala fe, es por parte de los agentes de seguros, y de la compañía, y meto también en el saco al perito médico por ser haber mentido en su informe.
CONCLUSIÓN:
Habiendo tanta prueba a favor mía, tantas incongruencias, falsedades y contradicciones en los testigos de Ocaso, siendo estos parte más que convenida e implicada directa sobre el documento principal, como es ese falseado cuestionario, que además, para más gravedad viene rellenado de puño y letra por uno de los mismos testigos y agente de seguros de esa compañía, contradiciendo esto las mismas normas de ese cuestionario, y aun teniendo también en cuenta lo raro, incongruente, y dudoso de su forma de estar relleno, con todo puesto que NO. ¡¡¡ SEÑORA JUEZA !!!.
¿ Está usted ciega o sorda ?. A ver, Se estaba juzgando a Ocaso por su negativa a cumplir con su obligación de indemnizarme después de estar pagándolo durante años, y para ello presenta un cuestionario que yo le digo y declaro no haber visto nunca, y que se presenta rellenado además por los mismos agentes de seguros, de una manera tan extraña y dudosa que sólo favorece a la aseguradora y a estos mismos agentes, trayendo además como testigos de ese falso rellenado a esos mismos culpables de haberlo rellenado, quedando claro también que este cuestionario de salud va dentro de la misma solicitud, que es lo que se firma en realidad, y que fue lo que yo declaro haber firmado a petición de los agentes, pero que no se me hizo cuestionario alguno como así quieren hacer creer valiéndose de que consiguieron mi firma de este modo oculto. ¿ Y con todo esto...?, ¿ a usted señora Jueza?, ¿ le valen como testigos válidos, veraces y desinteresados los mismos que pretenden esquivar la culpabilidad de haber rellenado un cuestionario tan falsamente que sólo le beneficiaba a ellos para que la compañía no les pusiera pegas al aceptarlo ?, ¿ es que no ve que no tienen otra salida que declarar falsamente y a favor de Ocaso ?, ¡¡¡¡ ¿ cómo se van a culpar ellos mismos de haberse llevado un cuestionario sólo con mi firma de manera oculta? !!!!. ¿ En serio les va a preguntar usted a los mismos que han perpetrado un fraude si lo han hecho ?.
¡¡¡ Ellos siempre van a declarar lo que les convenga y no les perjudique y eso coincide y guarda el mismo interés que lo que le conviene a Ocaso. !!!
Ante todo decir que aun no he dejado de creer en la justicia y en los Jueces, por mucho que uno de ellos haya tenido una actuación nefasta e injusta, quiero creer que por error como human que es, con la ilusión puesta en que sus compañeros, los respetables Jueces y Juezas del Tribunal Supremo, enmienden su grave error, ya que los tribunales de Segunda Instancia de Sevilla, no se han querido mojar del todo, estimando parcialmente mi recurso a esta injusticia.
Por lo que...
Señora Jueza, yo..., como buen ciudadano acato su sentencia, PERO NO PUEDO ESTAR DE ACUERDO, y mi derecho a la libertad de expresión me permite decir que...
Usted no ha hecho caso a los informes médicos y a lo que dicen los profesionales que los realizaron, los mismos que tienen el valor de certificar todo tal y como hay que hacerlo, sin cambiar ni reinterpretar una sola coma, como así han hecho ustedes, señora Jueza, el abogado de Ocaso, y el patético perito médico, ninguneando, y subjetivamente a su entender reinterpretando lo diagnosticado por esos profesionales de nuestra sanidad, los que no necesitan que nadie les diga lo que han querido poner en dichos documentos, los cuales están respaldados por su alta experiencia y especialización en ello, llevando a cavo todas las investigaciones necesarias para llegar a dar sus dictámenes. Y cómo usted no ha hecho caso a su literalidad en cuanto a lo que certifican, y SÍ ha hecho caso a lo que le ha presentado el abogado de Ocaso, usando un informe de un perito médico que no tiene especialización superior a los que emitieron dichos informes médicos, para afirmar cosas distintas a lo que en esos informes se decía, y llegando a mentir en este informe este perito médico. Es por ello que usted señora Jueza se ha dejado influir por una información subjetiva y un informe falseado para favorecer al poderoso.
Usted no ha hecho caso, a que los testigos agentes de seguros, son parte más que implicada en ese cuestionario, y por ello PARTE INTERESADA, e imposible que puedan declarar algo que va en contra de ellos mismos.
Usted no ha hecho caso..., del rellenado tan extraño y dudoso de ese cuestionario, tan esclarecedor como notable en su manipulación, al contrario que los Tribunales Superiores de Sevilla, que en segunda instancia si han podido comprobar esto, que ese cuestionario así de dudoso rellenado sólo favorece a la compañía de seguros.
Usted ha actuado con arbitrariedad a favor del poderoso, al acoger cómo prueba principal sólo mi firma en esa solicitud, firma que era necesaria según las normas de ese mismo documento, pero ignorando, ninguneando y rechazando otra prueba de la misma importancia o más que mi firma, y es otra norma de ese documento, el cual, a parte de tener en sus normas el que tenga que ir firmado por el asegurado, deja bien claro, y no sólo en el apartado de normas, sino que lo vuelve a remarcar en el mismo cuestionario en su encabezado, o sea, que se expresa en esa solicitud DOS veces la obligatoriedad de tener que,¡¡¡ SER SIEMPRE RELLENADO DE PUÑO Y LETRA POR EL ASEGURADO !!!.
¡¡¡ Señora jueza !!!, ha cogido usted la norma o clausula de un documento que más le convenía al poderoso, cuando ese documento dice que no será válido si no cumple con todas sus normas de rellenado. Y es que, la norma de que tenga que ir rellenado de puño y letra por el asegurado, está remarcada DOS veces en esa solicitud, una vez en sus normas..., y otra vez más en el encabezado del mismo cuestionario, y bien resaltado, y eso..., no es por capricho ni casualidad, es por ser de vital importancia para demostrar que realmente el asegurado ha sido sometido a ese cuestionario de salud, y la firma pasa a ser algo secundario, pues se pueden dar casos, como en el que ahora mismo nos encontramos, en el que se firma la solicitud del seguro, pero NO se hace el cuestionario de salud que lleva esta misma. Es por ello, que esto es una arbitrariedad a favor del poderoso, al valerle a la Jueza que sólo cumpla lo de la firma, cuando la otra norma es mucho más esclarecedora, y sentenciadora de quién fue el autor real de la contestación a las preguntas de dicho cuestionario, al ser escritas de puño y letra por el asegurado. Cuando un documento exige unas normas para su rellenado, es por algo, y este debe cumplir con todas ellas para que tenga total garantía y valor veraz, y que el hecho de que ese documento además, sea un documento que lleva implícita la característica de ser ambiguo, o sea, llevar dos documentos a validar con una sola firma..., al valer la firma para validar la solicitud lo mismo que para validar el cuestionario de salud que lleva adjunto, es por ello mismo por lo que...., es de vital importancia, el hacer caso a la totalidad de sus normas, ya que uno de los documentos en los que se divide, el cuestionario..., tiene que ser rellenado de puño y letra por el asegurado, para que este de fe de quien lo ha contestado realmente, y no valerse este cuestionario de la ambigüedad de esa firma sobre la solicitud del seguro. ¡¡¡ INCREIBLE !!!. La única mala fe que ha habido, es por parte del agente de seguros y de su compañía Ocaso, al quitarme el derecho a rellenar de mi puño y letra ese documento de vital importancia, y eso usted..., Señora Jueza..., le ha dado igual aun siendo una injusticia.
Usted no ha hecho caso, y ha declarado de intrascendente..., el que unos testigos se contradigan y mientan sobre lo que se les preguntó de una de las preguntas de ese cuestionario, donde quedaba bien clara la contradicción en la que cayeron ambos y la falsedad de lo que hablaban sobre esta pregunta, dejando esta prueba de interrogatorio ver ya la deriva a ser este cuestionario rellenado de la misma forma falsa que esta primera pregunta, algo que le tendría que haber llevado a la correcta deducción de que ese cuestionario no fue hecho al asegurado. Y es más, que en esa misma pregunta, cuando se le pide explicaciones al primer testigo agente jefe de seguros del porqué cae en esa contradicción..., este responde con algo insólito, inesperado y que tuvo que hacer saltar las alarmas en la cabeza de la Jueza, y que fue..., al responder este testigo con una acusación directa hacia el asegurado, osea, hacia mi, respondiendo algo que nada tenía que ver con lo que se le preguntaba, para lanzar una acusación por la que ni se le había preguntado y que no venía a cuento de esta pregunta, siendo este comportamiento denominado en la jerga judicial como de …,“ Excusatio non petita, accusatio manifesta”. Lo que significa que la acusación directa sobre mi por parte de este testigo, nada más empezar el juicio, sin que nadie le hubiese preguntado aun por ello, y versando la pregunta sobre otra cosa diferente, deja de manifiesto la implicación directa de este testigo en el falseado de esa misma pregunta, y de su afinidad y mismo interés en lo que defiende Ocaso, el acusarme de ocultar enfermedad grave. ¡¡¡ INCREÍBLE !!!.
¡¡¡ TODO LO HA BASADO USTED SEÑORA JUEZA EN LA PRUEBA TESTIFICAL DE TESTIGOS IMPLICADOS, Y ESO NO ES HACER JUSTICIA ES TODO LO CONTRARIO !!!
Todo esto lo puedo decir porque es mi derecho a la libertad de expresión, pues una cosa es acatar la sentencia, la cual he acatado, y otra es, no estar de acuerdo, y por ello he cursado las diferentes alternativas que me ofrece la ley para defenderme, y llegaré hasta el final para revertir esta injusticia. Y repito, es mi derecho, y si algo de lo que destapo cree esta Señora Jueza, que no es cierta, vuelva a demostrarlo en otro juicio, allí nos encontraremos, con todas las de la ley, para ver punto por punto la verdad de todo.